Alejandro Viedma:
“… el 10% de la población se incluye en las minorías sexuales…”
Alejandro Viedma nació en Capital Federal. Posteriormente se fue a vivir con su familia a Ciudadela; cursó el secundario en el barrio de Devoto, y en el 2001 se recibe de Lic. en Psicología en la UBA. Realizó innumerables post grados: Clínica Psicoanalítica; Coordinación de Grupos con Multi-recursos Técnicos; Acompañamiento Terapéutico; Neurosis y Psicosis; Sexología de la Homosexualidad; El amor, el saber y el goce en las distintas estructuras clínicas. Actualmente trabaja como terapeuta en forma privada y coordina grupos de reflexión de varones en la institución Puerta Abierta.
La Voz- ¿Cuándo entra en contacto con Puerta Abierta?
Alejandro Viedma- En 2004, por intermedio de la Lic. Graciela Balestra.
Esta institución lésbica-gay que nació en 2000, básicamente como un emprendimiento de un grupo de mujeres, después incorpora grupos de reflexión de varones. También se brinda acompañamiento terapéutico y psicoterapia para las personas que lo necesitan.
La Voz- ¿Cuál es tu preocupación con relación al género?
Alejandro Viedma – Primeramente tuve la necesidad de informarme. A partir de ahí traté de informar y educar a las demás personas. Siento que hay muchos prejuicios y estereotipos creados básicamente alrededor de la sexualidad. Ni hablar en torno de las minorías sexuales: gays, lesbianas, travestis, transexuales y bisexuales. Me fui interesando en las diferentes corrientes y opiniones; por ejemplo, me fui metiendo en los estudios gay-lésbicos de EEUU.
La Voz- En Capita Federal, ¿dónde radica el problema de las minorías sexuales?
Alejandro Viedma- Básicamente en el tema de los derechos. Si no hay un respaldo legal siempre habrá una pata de la silla menos. Cuando me refiero a derechos quiero decir la posibilidad de casarse, adoptar, heredar, obras sociales, etc.
Después hay cuestiones de discriminación en los diferentes espacios: escolar, laboral, social… No hay persona LGBT que no haya sufrido algún tipo de discriminación, pese a que ahora está mucho mejor el tema, más aceptado. Siempre marco la diferencia de lo que pasa en Buenos Aires con el resto del país, donde en el interior se hace más difícil.
La Voz- ¿Cuál es la mayor “pesadilla” que sufren esas personas que pertenecen a las minorías sexuales?
Alejandro Viedma- El tabú que existe mucha gente lo sufre por estar silenciado, porque no lo puede hablar con nadie, no tiene diálogo con la familia por miedo a que los expulsen. Muchas veces se crea una doble vida donde se produce un desgaste importante porque está mintiendo, ocultando parte de la vida propia.
La Voz- ¿En la parte laboral existe mucha discriminación?
Alejandro Viedma- Todavía sigue pasando, menos que antes porque ahora es políticamente incorrecto tener ese tipo de actitudes. Seguramente es mucho más difícil para una travesti; se dice una travesti o la travesti, porque sus actitudes, su maquillaje, sus ropas, su diferencia, es como un cachetazo a la sociedad, porque alguien que nació biológicamente varón decide usar el género femenino. Además sufren el problema legal profundamente porque no pueden tener documentos con sus nombres de elección.
La Voz- ¿Cuál es la diferencia de la travesti con el transformista?
Alejandro Viedma- Los actores que se travisten para realizar espectáculos son transformistas. Las travestis incorporan su elección de género de manera permanente. Aunque todo es bastante complejo y tratamos de categorizar para después abolir esas categorías.
La Voz- ¿Cómo se define a las personas que son pasivas o activas?
Alejandro Viedma- Creo que la pasividad no se define por ser penetrado ni es activa necesariamente la persona que penetra, tiene que ver también con actitudes, con sentimientos, con formas de movilizarse dentro de la cama y también en la vida en general. Para ser excitable y ser penetrado o penetrada también hay que ser muy activo para excitar al otro.
La Voz- ¿Cómo ves el comportamiento de la sociedad en general?
Alejandro Viedma- Si nos guiamos por las marchas del orgullo gay, lésbico, transexual, bisexual, años tras años llevan más personas y es una marcha de celebración por las conquistas, de fiesta, pero también de lucha por los derechos, por lo que falta. Participan más de 15.000 personas, que si uno mira diez años para atrás se percibe un logro buenísimo y es un incremento bárbaro de gente. Ahora, convengamos que 15.000 dentro del número de personas que se incluyen en las minorías sexuales, que se habla en torno al 10% de la población, no es nada. Por eso la necesidad de seguir luchando y participando por los derechos.
La Voz- ¿En Capital el casamiento entre personas del mismo sexo es ley?
Alejandro Viedma- No, aquí lo que se aprobó es una ley de unión civil, en el 2002, y se llevó a la práctica en el 2003. Es la primera unión civil en Latinoamérica. Fue un paso importante, pero a nivel legal no contempla todos los derechos que tiene un matrimonio heterosexual. Por eso digo que es una ley discriminatoria; porque no considera la adopción, obra social, herencia, etc.
La Voz- Con Macri gobernando la Capital ¿cómo ves la situación?
Alejandro Viedma- A mí me parece que no va a hacer nada para colaborar, para apoyar, para que vaya adelante todo esto y siga creciendo. Él ha hecho declaraciones homofóbicas, como que la homosexualidad es una enfermedad y todo ese tipo de cosas que ya están totalmente descartadas hace décadas por la Organización Mundial de la Salud.