¿Qué ven cuando no nos ven?

-Por lo menos así lo ve el lic. Alejandro Viedma-
Columnas 20-05-2008, AG Magazine, portal de noticias declarado "De Interés Municipal" por el Concejo de la ciudad de Rosario por su trabajo en favor de la difusión de la temática LGBT.

Una reflexión acerca de la visibilidad del colectivo de gays, lesbianas, bisexuales y trans.

Antes de comenzar, quiero destacar que en la presente columna utilizaré la "x" como forma de abarcar todas las identidades, sin especificar género. El autor.

¿Se acuerdan cuando jugábamos a la escondida con nuestrxs vecinxs del barrio, compañerxs de colegio o primxs? Una propuesta: volvamos tan solo por un rato a nuestra infancia.
Cuando al “otro” le tocaba empezar a contar en voz alta sin mirar, generalmente tapando sus ojos con uno de sus antebrazos mientras se apoyaba en un árbol, poste o pared, uno tenía que buscar el lugar más inaccesible para que aquel partenaire lúdico tardara en encontrarme -y también a mis compañerxs, cuando jugábamos más de dos personas- después de terminar su conteo.
¿Qué era lo más divertido? Buscar, hallar un sitio y (res) guardarme en ese lugar que elegí para que el “otro” se confrontara con sus habilidades, sentidos, movimientos y límites, ya que él o ella tenía que “descubrirme” y “deschavarme”, volver a “hacerme aparecer” en esa “piedra libre”.
Pero ¿qué ocurría cuando yo estaba más del tiempo que hubiese deseado sin ser percibido, visto, descubierto? Me aburría, me incomodaba, quería que el “otro” me registrara o que el juego finalizara.
En realidad, el escondite “perfecto” hacía que la actividad terminara, por lo cual esa guarida nunca tenía que ser impenetrable.

PUNTO Y COMA, EL QUE SE ESCONDIÓ SE EMBROMA
Ahora, ya siendo adultxs, parece que ciertos juegos dejaron de ser tales.
Es decir, lo que antaño era diversión, placer, adrenalina, se fue transformando en algo que muchxs ya no estamos dispuestxs a vivir de manera idéntica (más allá de que nada de lo pasado será igual al hoy o al futuro), sino que respondemos con otra actitud.
Esa forma de erguirse en lo cotidiano, de mostrarse, de no buscar una madriguera contenedora que funcione como refugio de los miedos e inseguridades y empezar a hablar de la propia sexualidad, como una cuestión política, es la VISIBILIDAD.
Pero… ¿Por qué seguimos en Argentina apuntando a y propiciando la visibilidad de lesbianas, gays, bisexuales y trans aún hoy, en el 2008?
Simplemente porque lo que se ve y se nomina, lo que se capta y se nombra, adquiere una dimensión de existencia.
Y porque mi propia existencia también ayuda, da fortaleza, energía y compañía a otrxs que todavía hoy y en nuestro país (sobre todo en pueblos y ciudades pequeñas del interior del mismo) tienen una “doble vida”, se siguen sintiendo solxs, como “bichos raros” ocupando esta tierra y por tal motivo “deben” seguir en ese escondite, en ese silencio, en esa oscuridad, en ese lugar que ahoga si uno persiste allí mucho tiempo, en ese closet que encorseta, en ese arma-rio (¿acaso no es el closet un arma de doble filo, una representación de algo que contiene y sofoca al mismo tiempo?).

VEO VEO… ¿QUÉ VES? ¡UN ARCOIRIS MARAVILLOSO!
Ahora bien ¿qué diferencias existen entre las diversas (in) visibilidades del colectivo LGBT?
En el caso de las lesbianas, parecería que la visibilidad cuesta el doble, primero por ser mujeres, lo que implica una inequidad respecto de los varones, tanto de carácter social, como cultural, histórico, económico, legal, etc.
Es por ello que el pasado 26 de abril del corriente año se celebró la primera edición del Día de la Visibilidad Lésbica en Madrid, en donde se afirmó que “la visibilidad es una prioridad absoluta”, en el sentido de “la plena ciudadanía”.
Paralelamente en la ciudad de Rosario se desarrolló, el 3 y 4 de mayo de 2008, el Primer Encuentro Nacional de Mujeres Lesbianas y Bisexuales, con el objetivo de visibilizar a esta “minoría” en la lucha por sus derechos.
Con referencia a los varones gay, podríamos pensar en las diferencias internas (no por ello ausentes en las mujeres) que se dan en las distintas generaciones. En los más jóvenes se percibe una manera novedosa de encarar y accionar en este tema; se les ha facilitado este camino a partir de los senderos abiertos por los cambios sociales (globales y locales) y por la firme lucha de compatriotas que militaron para gestar un nuevo (des) orden –al decir de Roudinesco- de inclusiones.
En este sentido, es importante recordar que nuestro país vivió un fuerte proceso represivo. Somos cuasi novatos en el ejercicio de la democracia.
Hace treinta años no existía internet para comunicarse aunque sea desde el anonimato, ni espacios de reflexión que plantearan las temáticas particulares de los grupos gay (y donde pudieran sentirse perteneciendo a una institución con pares), ni organizaciones conocidas por todos donde lograran acercarse por algún inconveniente suscitado.
Hoy nos rodea un ambiente gay-friendly (no tan real, pero instalándose en cada vez más zonas), nos abordan noticias variadas donde lo simbólico circula, por lo cual lo gay por fin está dejando de ser lo enfermo, lo insultante, lo sórdido, y los gays se permiten pensar en ser padres (para muchos esto ya es una realidad), formar sus familias o ya se unen civilmente.
Resumiendo, si bien casi todo está mucho más abierto para las nuevas generaciones por los motivos multifactoriales que he deslizado (aquí también sirve mucho el avance español y cómo llega esto, sobre todo cómo ayuda a los que somos "hijos de la madre patria"), se complica aún para los mayores de 40/50 años. Todavía hay algo del ocultamiento, del secreto, de la marginalidad operando. No se debe perder de vista la marca sociocultural heredada de la dictadura.
El tabú sigue entonces funcionando, reproduciéndose, actuando en las propias lesbianas y en los propios gays, que repiten cuestiones prejuiciosas, estereotipadas y anacrónicas respecto a la homosexualidad, a las “nuevas familias”, desde lo discursivo hasta la manera de desenvolverse íntimamente con un/a compañerx. Actos represores/represivos al fin, tabú en acto y en potencia.

Respecto a las chicas trans, la visibilidad es inherente a su identidad, reflejada en sus cuerpos.
Por tal motivo, travestis y transexuales transitan las calles, generalmente desde que son expulsadas de sus hogares en su pubertad, tornándose así pública su condición de manera “natural”.
A las chicas trans se les “dificulta” más que a los demás miembros del colectivo LGBT “disimular” sus cuerpos sexuados en relación con lo socialmente esperado. Esta cuestión fenomenológica es correlato del inconsciente colectivo, que las trata como enfermos, en lugar de reconocer su singular identidad, como la de cualquier otro ser humano.
Lo que complica la situación de marginalidad de las personas trans es que casi no son incorporadas a ninguna política de asistencia estatal, expulsándolas (¿otra vez las “correrán” de sitio -bosques de Palermo-?) sin mira-mientos del espectro humano.

LO ESENCIAL ES VISIBLE A LOS OJOS
A mí, como psicoanalista y agente de salud, me interesa pensar y trabajar sobre los efectos del tabú funcional y lo que lo circunda, sobre las consecuencias del silencio, del aislamiento, de la vergüenza, del miedo.
Como digo siempre: "todo lo que no pasa por la palabra, pasa por el cuerpo". Considerando este aspecto, noto que mucha gente LGBT que esconde esta parte de su vida lo sufre en lo corporal, a través de distintas manifestaciones. Hay mucha psicosomática alojada en estos sujetos. Y el silencio, la mentira, los inventos producen un desgaste profundo en lo psíquico, emocional, corporal. Por tal motivo, es importante que primero se conscientice esto para luego poder modificarlo.
Otra cuestión, también conectada con lo precedente: lo mucho que le cuesta a muchísimas personas LGBT el disfrutar. El habilitarse a ser felices, a no relacionar todo con el trabajo o el esfuerzo que tienen que hacer para aparentar ser como los demás quieren.

LOS ESPEJOS, EL NARCISISMO DE LAS GRANDES DIFERENCIAS
La relación con los demás está permanentemente moviéndose entre (des) identificaciones. Siempre opera la coincidencia y lo discordante. La estructura vincular implica ese movimiento de entrada y de salida, movimiento intrínseco-extrínseco permanente en los vínculos, ya que coincidimos y estamos en desacuerdo con los demás.
Lo mismo sucede en el narcisismo: uno se pone frente al espejo y dice “soy, pero no soy el que está ahí”. Reconocimiento/no reconocimiento de unx mismx.
Si esto es estructuralmente humano, imagínense entonces cuando unx disfraza, se “tapa”… Si siempre estamos rondando entre una identificación y una des-identificación, será más confuso aún para lxs demás saber qué me pasa, qué siento, cómo o quién soy si intento esconder una parte considerable de mi vida.
Cuestiones constatadas cuando escuchamos a gays y lesbianas decir “en mi casa supongo que lo saben, pero nunca se habló del tema”, o “ni se imaginan que soy así”, etc.

Y YA LO VE, Y YA LO VE… ES PARA USTEDES QUE LO MIRAN POR TV
De la misma manera que no hay certezas en la vida, no hay una clave única o técnica especial para la salida del closet, para la visibilidad, sino la que cada cual pueda elegir, armar, poner en práctica en el aquí y ahora de cada situación.
Considero que cada unx de nosotrxs puede elegir jugar a ser otra persona. Podemos usar mascaradas, podemos enredarnos en historias que no son las propias. Tenemos la posibilidad de mentir a lxs que nos rodean a diario, mas debemos ser conscientes que ante todo nos mentimos a nosotrxs mismxs y que a veces uno también juega con fuego.
Yo prefiero hacer una fogata fuera de mí para combatir la (de lxs demás y la propia) homo/lesbo/transfobia y para festejar el orgullo de no avergonzarme por ser quien y como soy.
Vos también podés hacerlo, o iniciar un fuego interno que puede hasta quemarte vivx por dentro y fuera de tu ser.

Colorín colorado, este juego… ¿ha acabado?

Pedro Zerolo visita nuevamente Buenos Aires

El jueves, en el Congreso, disertará sobre el logro del matrimonio gay en España en un panel organizado por la FALGBT y el INADI • El pasado sábado se celebró la jornada internacional contra la homofobia con un asado en el Club de Osos de Buenos Aires.

19-05-2008 | Activismo

El próximo jueves 22 de mayo, en el Senado de la Nación y en el marco del Día Internacional contra la Discriminación por Orientación Sexual e Identidad de Género, el INADI y la Federación Argentina LGBT convocan a un panel en el Congreso de la Nación sobre Matrimonio para parejas del mismo sexo.

En la oportunidad, Pedro Zerolo –quien es asesor del presidente español José Luis Rodríguez Zapatero en asuntos de diversidad sexual– comentará sobre los avances logrados en España en esta materia y María Rachid –presidenta de la Federación Argentina LGBT– sobre todo el trabajo realizado por la FALGBT para lograr la igualdad jurídica en Argentina.

Además, María José Lubertino –presidenta del INADI– presentará el proyecto de ley del organismo para modificar el Código Civil y así garantizar el acceso al Matrimonio de las parejas del mismo sexo. Este proyecto se presentará ante el Ministerio de Justicia, Seguridad y Derechos Humanos para ser presentado por el Ejecutivo en el Congreso de la Nación.

Las parlamentarias Vilma Ibarra (Encuentro Popular y Social) y Silvia Augsburger (Partido Socialista) comentarán sobre los proyectos presentados el año pasado con el mismo objetivo.

EL ASADO DE LA DIVERSIDAD

El pasado sábado 17 de mayo, con oportunidad de la celebración del «Día Internacional de Lucha contra la Discriminación por Orientación Sexual y por Identidad de Género», la FALGBT organizó un asado en el local del Club de Osos de Buenos Aires. La reunión contó también con la presencia de la señora María José Lubertino, y del señor Pedro Zerolo, representante del Gobierno Español y célebre activista por los derechos LGBT, de visita en nuestro país.

Se trató de una amena reunión de camaradería en la que se pudo disfrutar de buena carne y buen vino, como corresponde a nuestra tradición argentina. Tampoco faltó la guitarreada y mucho menos los discursos.

La licenciada Lubertino aprovechó la oportunidad para hacer entrega del Premio INADI, en manos de Pedro Zerolo, para que fuera entregado por éste al actual presidente del Estado Español, en reconocimiento por los logros alcanzados por su gobierno en beneficio de los derechos de las minorías.

Por su parte, Pedro Zerolo agradeció en nombre del gobierno español y expuso su opinión acerca de la realidad de la lucha por los derechos LGBT en el mundo. «No quiero dejar pasar la oportunidad de recordar -dijo- que hoy celebramos un día muy importante: el Día Internacional contra la Homofobia y la Transfobia. Un día de emociones encontradas, un día de recuerdos, un día de memoria, un día para recordar que estamos viviendo un momento que no debemos desaprovechar. Porque durante siglos quienes han sido como nosotros y como nosotras han sido segregados, apartados, discriminados, vilipendiados y estigmatizados, agredidos y condenados a muerte».

En el mismo sentido agregó: «Este es un día par recordar que la situación no es todavía la que quisiéramos que sea y que además no soplan buenos aires. En Europa se empieza a ver de nuevo la garra de la ultraderecha política y del integrismo religioso. En esa Europa a la que siempre hacemos referencia como el paraíso de las libertades, empiezan a escucharse discursos ultraconservadores, homófobos, machistas, racistas y xenófobos. Pero no por gente desconocida sino que esos discursos se escuchan en boca incluso de presidentes de república o gente de gobiernos de esa Europa que tenemos como referente».

Tampoco faltó en el discurso de Zerolo la mención de la cuestión local, en relación a lo cual fue claro y contundente: «Hoy que están nuestros presidentes y presidentas hablando, deberíamos recordarles desde abajo que Latinoamérica tiene muchísimo que decir. Creo que donde están pasando las mejores cosas en este momento en el mundo es en América Latina, donde mejor se están viendo los progresos de los movimientos sociales y de izquierda. Desde luego aquí se está viendo mucho más avance que en la vieja Europa. Por tanto, pasemos alguna vez del orgullo gay, del orgullo lésbico y del orgullo trans al orgullo latino». Y para que no quedaran dudas, recalcó: «Estamos llamados a hacer avanzadilla. Si España avanza, si Argentina avanza, marcaremos tendencia y desde luego Latinoamérica se convertirá en un referente mundial de que otro mundo es posible».

Certeras y transparentes las palabras de Zerolo, una personalidad que ha ido mucho más allá de los discursos y del que muchos de nuestros dirigentes deberían tomar ejemplo.

Informe de Víctor Ramírez para AG Magazine

Zerolo visitando el Club de Osos. Primera foto: junto a María Rachid y Guillermo, presidente del club. Abajo: Zerolo en el centro, Facundo García a su derecha y Viedma a su izquierda.

PRIMER TALLER SOBRE DIVERSIDAD SEXUAL EN UTE - CTERA

El sábado 17 de mayo se festejó el día mundial de la lucha contra la homo, lesbo y transfobia, estipulado por conmemorarse otro aniversario (17-05 de 1990) de cuando la Organización Mundial de la Salud (OMS) sacó a la homosexualidad de la lista de enfermedades, por lo cual se realizaron varios eventos.


Por la mañana se llevó a cabo el primer taller sobre diversidad sexual organizado en la Unión de Trabajadores de la Educación (UTE). Fue histórico abrir el debate, informar y educar a las propias educadoras, las maestras. Lo coordinó la lic. en Psicología Cecilia Ferrari.


Los objetivos de dicho encuentro fueron:

-Prevenir y eliminar el maltrato a causa de homofobia en contexto escolar;

-Brindar un espacio enmarcado en los DDHH para dialogar, reflexionar y conocer sobre diversidad sexual;

-Facilitar los procesos de visibilización de los docentes LGTB promoviendo el respeto y la libertad de expresión;

-Ofrecer asesoría, material de lectura para docentes, y talleres de padres, familiares y amigos de lesbianas y gays.


Los licenciados en Psicología Cecilia Ferrari y Alejandro Viedma